La dinastía japonesa de fiesta

Japón se consagra campeona del Clásico Mundial de Beisbol por tercera vez tras vencer a Estados Unidos 3-2 en la gran final realizada en el Loandepot de Miami. El MVP del torneo fue Shohei Ohtani, quien fue el encargado de cerrar el partido con un out de película al ponchar a su compañero de equipo Mike Trout, quien es considerado uno de los mejores bateadores del mundo.

La selección nipona quedó campeona invicta igualando la hazaña lograda por República Dominica en el año 2013, Japón venció en fase de grupos China, Corea del Sur, y Australia, en cuartos de final a Italia, en semifinales a México y en la gran final a Estados Unidos.

El lanzador ganador del partido fue Shota Imanaga, mientras que en la derrota fue Merril Kelly, el salvamento se lo adjudicó el ya mencionado Shohei Ohtani.

Por la selección Norteamericano el Short Stop Trea Turner y el bateador designado Kyle Schwarber despacharon cuadrangulares solitarios aunque no fue suficiente para conseguir la victoria, por el equipo Japones el tercera base Munetaka Murakami y el primera base Kazuma Okamoto se volaron la cerca.

El torneo fue un espectáculo de béisbol con figuras destacadas como de la talla de Trea Turner, Mike Trout, Shohei Ohtani, José Altuve, Randy Arozarena.

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