El jóven Tadej Pogacar, de 22 años, hizo historia en el Tour de Francia al adjudicarse en París el segundo título consecutivo, un logro que a su edad no lograron conseguir grandes ciclistas como Eddy Merckx y Bernard Hinault.
Pogacar entró en la meta de los Campos Elíseos como ganador de la 108 edición del Tour, tras una etapa de homenaje al campeón que se disputó con carácter festivo entre Chatou y la capital francesa, con un recorrido de 108,4 km. Por otro lado, en un esprint algo agitado, Van Aert sorprendió a Cavendish, quien fue tercero. Quedó empatado a 34 con Merckx, pero con el consuelo de lograr el maillot verde por puntos de nuevo, diez años después.
El podio parisino vio ondear nuevamente la bandera eslovena tras la nueva hazaña de Pogacar, un corredor dedicado y capaz de lograr increíbles hazañas. Ganó con la prenda y el carácter del líder las dos etapas de montaña en Pirineos.
Pogacar escuchó el himno de su país con emoción, mientras era observado y vitoreado por su familia, padres y hermanos. Allí aguantaba las lágrimas el ciclista de Klanec, flanqueado por el danés Jonas Vingegaard y el ecuatoriano Richard Carapaz.
LGS/Azarramera
